El 80% de lo que un niño aprende en sus primeros años de vida entra a través de los ojos. Un problema visual no detectado a tiempo (como un ojo vago, un estrabismo o una alta graduación) puede interferir directamente en su desarrollo motor, cognitivo y en su futuro aprendizaje. Los niños no saben si ven mal; simplemente asumen que el mundo es como lo ven.
Por eso, en Óptica San Sebastián seguimos el protocolo de realizar la primera revisión visual a los 6 meses de edad, y posteriormente, revisiones anuales. Disponemos de pruebas objetivas y juegos adaptados para evaluar la visión de los más pequeños, incluso antes de que sepan hablar.
Nuestra valoración infantil va mucho más allá de intentar graduar. Es una evaluación completa del desarrollo del sistema visual: